Los primeros pasos
Era 1969. Mientras el mundo miraba fascinado al cielo y veía al hombre pisar la Luna, aquí en la Tierra yo, con 13 años, soñaba en grande a mi manera.
Ya pensaba en dar mis primeros pasos hacia mi primer empleo. Recuerdo el reloj que me regalaron mis padres y cómo, por impulso, lo cambié por una aventura en los negocios: asociarme con un desconocido y su carrito de helados.
Cuando mis padres se enteraron, no me reprendieron. Vieron a un joven con espíritu emprendedor y me ayudaron a encaminar esa energía hacia mi primer empleo.

La primera experiencia en el mercado laboral
En el primer capítulo conté mis primeros pasos. Ahora quiero recordar mi entrada al mercado laboral.
En 1970—cuando Brasil se convirtió en tricampeón mundial de fútbol—conseguí mi primer empleo como mensajero (office boy) en 'Roupas Profissionais Primor', en Itaim, São Paulo.
La oficina era un mundo nuevo para mí. Seguía el flujo de ventas, observaba técnicas de negociación, mejoraba mi mecanografía y pronto fui ascendido a auxiliar de oficina.

El nacimiento de Ideal Work
Después de mi primer contacto con el mercado textil, no me detuve.
En 1974, junto con mi primo, transformamos un garaje en el barrio de Leopoldina, São Paulo, en un taller de uniformes. Aún recuerdo el sonido de las máquinas Singer.
Con objetivos claros y una cartera inicial de clientes, construimos nuestra propia marca. Así nació Ideal Work: el 24 de octubre de 1974, con seis colaboradores, iniciamos una nueva etapa en nuestras vidas.

La conquista del primer gran pedido
En 1975 nos encontramos con un desafío que podía cambiar nuestro destino: un pedido de ocho mil batas de Tintas Wanda.
Ese pedido nos permitió invertir en nuevas máquinas y ampliar las operaciones. El garaje se quedó pequeño y el crecimiento exigía un espacio mayor.
Ese mismo año pude comprar mi primer coche: un Fusca amarillo, símbolo de nuestro progreso.

Adiós, garaje: hora de expandirse
1976 fue otro punto de inflexión. Tras dos años intensos en el garaje donde nacieron nuestros sueños, nos mudamos a un espacio más grande en Pirituba.
Ese año nos convertimos en una confección homologada por Santista, el principal fabricante de tejidos para uniformes en Brasil, elevando nuestro nivel y abriendo puertas que antes parecían lejanas.
También fue un año de nuevos desafíos y aprendizajes que fortalecieron la base para los siguientes pasos.

El primer galpón y el camión
En 1980 volvimos a mudarnos: de Pirituba a un galpón de 2.200 m² en Lapa. Incluso en lo que muchos llamaron la 'década perdida', seguimos creciendo.
El cambio no fue solo físico: representó una transformación estructural y operativa, aumentando nuestra capacidad para atender pedidos mayores.
Un hito inolvidable fue la compra de nuestro primer camión baúl, una herramienta clave para la expansión.

La Línea Noche y la consolidación en el mercado
A mediados de los años 80, Brasil vivió una grave crisis económica. Para Ideal Work, también fue una oportunidad de reinventarnos.
Entre 1985 y 1986 decidí diversificar lanzando la Línea Noche, nuestra colección de ropa de dormir.
Eso amplió nuestra base de clientes, nos posicionó en un nuevo segmento y ayudó a consolidar nuestra presencia en el mercado.

Crecimiento e innovación en los años 90
En 1991 tomé una de las decisiones más audaces de mi trayectoria: mudarnos a un nuevo edificio de alto estándar en Jandira, cerca de São Paulo.
Con 5.000 m² de área construida, ampliamos la capacidad a 8.000 prendas diarias y producíamos más de 2 millones de piezas al año. También pasamos a contar con más de 300 colaboradores.
En ese momento ya éramos líderes en ropa masculina para dormir, y la estructura nos preparó para atender una demanda creciente.

Uniformes corporativos y nuevos horizontes
A inicios de los años 2000, el mercado textil en Brasil cambió drásticamente. Grandes minoristas enfrentaron dificultades, afectando a todo el sector.
Ante ese escenario, Ideal Work tomó la difícil decisión de salir del segmento de grandes almacenes y buscar nuevas oportunidades.
En 2005 entramos al mercado de uniformes corporativos con la adquisición de Duplo R, abriendo un nuevo capítulo y nuevos horizontes para el negocio.

Celebración de medio siglo
En 2024 celebramos 50 años de una trayectoria que comenzó con un sueño y nos llevó a la posición de empresa de uniformes más sostenible de Brasil.
Nuestro camino ha estado marcado por la innovación, el compromiso con la calidad y la responsabilidad ambiental. Hoy operamos cinco unidades fabriles en Jandira (SP), Pilar do Sul (SP), Santo Antônio da Platina (PR), Macaé (RJ) y un centro de distribución en Cambuí (MG).
Seguimos escribiendo nuestra historia con la misma pasión que nos trajo hasta aquí, recorriendo un camino de innovación, compromiso y sostenibilidad.
Antonio Rodrigues – CEO del Grupo Ideal Work

Nuestra historia en movimiento
Ahora que conoce un poco más sobre quiénes somos, le invitamos a ver nuestro video institucional.
En imágenes, transmite la esencia de Ideal Work: dedicación, innovación y respeto por quienes visten nuestros uniformes.
Desde 1974, evolucionamos con foco en la protección, el bienestar y la identidad del trabajador, siempre alineados a las necesidades del presente y con la mirada puesta en el futuro.

